Filly

Rise of Nightmares (Kinect) [review]


Rise of Nightmares es el primer juego que finalizo en Kinect, y es por lejos el más divertido que jugué. No es que haya jugado muchos: también probé Kinect Adventures y Child of Eden, el primero fue entretenido durante un par de horas y al segundo no le dediqué más de 30 minutos de juego.

Si bien GameSpot le da a Rise of Nightmares 5.5 puntos sobre 10, yo me inclino más por apreciar la jugabilidad y la forma en que este título aprovecha la tecnología brindada por Kinect, muy diferentes a las de los otros juegos que probé.

Sí, Rise of Nightmares no se destaca en los aspectos en los que generalmente se centra una review. Los gráficos están bien, pero no son nada del otro mundo. La música es bastante olvidable, aunque lograba estresarme cuando se volvía repetitiva (eso le agregaba emoción al juego, de una forma u otra). La historia… era algo sobre… tu esposa que era secuestrada por un científico loco, y tenías que ir a rescatarla en un… castillo de cyborg-zombies… o algo así… ¿Ya dije que la historia es bastante olvidable también?

¡No obstante! me pongo de rodillas ante la complejidad del sistema de combate usando Kinect que proporciona este juego. En la wiki está listado un total de 21 armas diferentes, pero lo curioso es que cada arma se maneja con la mímica correspondiente. Dicho de otra forma, para lanzar dados tenés que mover el brazo como si estuvieras arrojándolos; para utilizar un par de pinzas tenés que hacer un movimiento de apertura y cierre con ambos brazos; la motosierra se sostiene y se mueve utilizando ambas manos, etc., etc. Además, las armas se rompen con bastante rapidez, lo que te obliga a cambiar de técnica con mucha frecuencia.

Combinado con esto, la forma de moverse por el escenario del jugador es bastante básica: girar moviendo los hombros en la dirección querida, caminar colocando un pie al frente y adelantarlo más para acelerar. No, no se puede correr, y eso es lo que le agrega más emoción todavía, y le da ese toque de “survival” al survival horror, si es que se lo quiere clasificar así. No se le puede poner nombre a la emoción que sentís en el momento de: “OMG, OMG, estoy rodeada de zombies y no tengo arma… ¿Qué hago? ¿Qué hago? ¿Qué es eso tirado en el suelo?… ¿Eso es una…? ¿Es una… motosierra?” and suddenly you’re like:

Las acciones que se deben realizar durante el juego van desde correr en determinadas escenas (sí, sí, básico) hasta mover las manos ahuyentando insectos que te atacan, o hacer poses ridículas para abrir una puerta. No existe un tutorial para cada movimiento a realizar, y eso te garantiza una muerte súbita en varios momentos del juego. :P

Algo que hay que destacar es que este juego es entretenido siempre y cuando se juegue con otra persona, como suele pasar con la mayoría de los títulos para Kinect o Nintendo Wii. No es tan divertido si no hay nadie que se ría de cómo pegás piñas para todos lados sin técnica, o si no te podés reír cuando alguien más se asusta porque le apareció un monstruo gigante de repente por el pasillo (true stories).

En resumen, Rise of Nightmares no es lo que se denomina un BUEN juego, pero sí aprovecha al máximo la tecnología para la que se desarrolló y es MUY entretenido si se juega acompañado. Definitivamente recomendaría que esté en la lista de títulos de quien adquiera Kinect.